miércoles, 6 de octubre de 2010

UN RELATO EN MEMORIA DE QUIÉN NO LO PUEDO LEER Por Adán (¿los perros también van al cielo?)

Se fue. ¿Hace tiempo? Exactamente no lo sé. No dijo adiós.
Se fue, ¿Sufrió? Seguro. Estas cosas no son fáciles para nadie.
Se fue. ¿Le viste? No, no le vi marchar, pero sé que nunca volverá.
Se fue. ¿Y tú, te irás? Tal vez, algún día. Estoy segura de que le volveré a ver.
Se fue. ¿Estás bien? No, para qué mentir. Ya lo sabes, no hagas preguntas tontas.
Se fue. No llores. Lo siento, no lo puedo evitar, sé que le veré, pero no sé cuándo.
Se fue. Tranquila. Él estará contigo siempre. Eso es lo que todos dicen, y yo lo quiero creer, pero no entiendo por qué de pequeña te dicen que ha ido al cielo y ahora me dicen que estará conmigo.
Se fue. Se fue y no volverá a mi casa, a mis brazos, a mis ojos, pero estará conmigo, estará en mi mente, ése será su cielo.

0 comentarios:

Publicar un comentario